La Policía Local de Ronda detuvo en la madrugada del pasado sábado al domingo a una persona por conducción temeraria y, además, por negarse a hacerla la prueba de alcoholemia. Fueron los propios vecinos y viandantes los que alertaron de los hechos a los agentes, ya que recibieron varias llamadas en la central de la Policía Local que informaban de un vehículo que había dado un golpe con una esquina en la calle Marbella e iba circulando a pesar de que le faltaba un neumático.
Tal y como indican los agentes en su información, hasta la zona se desplazaron dos patrullas de la Policía Local interceptando a un vehículo que iba haciendo zigzag, el cual fue parado para identificar a su conductor. Según los propios intervinientes, “presentaba síntomas claros de estar bajo la influencia de bebidas alcohólicas”.
Se da la circunstancia de que, el conductor, lejos de colaborar con los agentes, se niega a que le practiquen las pruebas de alcoholemia “y comienza a insultar y amenazar a los miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, utilizando para ello a un perro que llevaba en el coche”. La comunicación policial recoge que “durante toda la intervención mantuvo una actitud violenta y desafiante”.
La actuación terminó con la detención de esta persona, actuación que se realizó con la colaboración de una patrulla de Policía Nacional. El vehículo, al que le faltaba un neumático, fue retirado con la grúa municipal y el perro se quedó en custodia en la Jefatura de la Policía Local, que en cuanto identificó a la propietaria del mismo, se lo entregó.
Además, la calzada quedó dañada por la circulación de este vehículo con la llanta y un reguero de aceite, por lo que tuvieron que avisar a los bomberos para su limpieza y por seguridad para el resto de conductores y viandantes.